Obviamente tengo mucho miedo del tiempo libre. Cada día sueño del día libre, con mucho tiempo para leer, para tener flojera, dormir mucho y no tener prisa. Pero cuando tengo aun pequeña posibilidad pasar tiempo en esa manera, me asuste mucho y yo empiezo a matacaballo imaginar que puedo hacer. No entiendo bien, por que eso pasa, por que siempre necesito correr, pasear, visitar a algunas personas, aunque soy una amante de libros, de escribir, de Internet.
El problema es que cuando estoy en casa, no hago nada provechoso: en lugar de leer algo bueno, leo o busco alguna tontería en Internet, en lugar de hacer tarea o escribir blog, duermo mucho o tengo alguna charla estúpida, con la persona, con quien no quiero hablar tanto. Además siempre como mucho y por fin estoy tan cansada, que parece que me cansa menos, cuando camino en bicicleta 30 km o practico tres horas de yoga. A veces me ayuda la agenda: escribir lo que necesito hacer en casa. Pero en este caso todo parece mas a trabajo que a pasando tiempo libre. Bueno, aun tengo esperanzas aprender eso. No puedo correr toda mi vida.
