sábado, 24 de julio de 2010

tormentos

    Bueno, me gustan los tormentos. Me encantan tanto que no puedo estar en casa cuando lo veo, aunque es un poco peligroso y puedo estar muy mojada. Claro que no siempre paseo durante lluvia, pero si tengo alguno razón para salir, lo hago. Me encanta sentir el poder y pasión de naturaleza (pues esa frase es demasiado pomposa :) ).
    Hoy decidí ir a mis clases en bicicleta, aunque entendía bien que muy probable hubiera tormento. Tuve esperanza que llegara antes de aguacero. Claro no he podido hacerlo. 
    Todo era como en las películas de horror: cielo negro, viento fuerte, ráfagas cada segunda, no podía ver nada por lluvia. Pero no me quedó! Mi pelo y mi ropa eran mojados (bien que no usaba rimel :) ), pues no mojados pero llenos de agua. 
    Cuando entré la escuela cada mi picada dejó una charca pequeña. Debí ir al baño para quitarme la ropa y retorcerla para no estar parecida a hundida. Suerte que había calor y no tenia mucho frío
P.D. pienso que escribo demasiado sobre los tormentos

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